Por parte de Samsung tenemos la reciente presentación de la Samsung Gear Fit.
Una cifra que da pié a creer en la masificación de los wearables
Según los datos que manejan los proveedores encargados de suministrar componentes para el ensamblaje de la pulsera, Samsung habría agotado el stock inicial acumulado del wearable durante los primeros 10 días a la venta en los mercados en los que ha estado disponible. A un precio recomendado de 199 euros, la pulsera se habría agotado en sus primeros compases en el mercado internacional. Las cifras que se manejan en estos momentos apuntan a que la marca asiática ya habría vendido entre 200.000 y 250.000 unidades de la mencionada pulsera. No obstante, estas prematuras estadísticas de venta no dejan de ser una aproximación a partir de mediciones un tanto rudimentarias por lo que será fundamental que Samsung se pronuncie al respecto. Si eso no sucede, posiblemente haya que esperar al anuncio de los resultados financieros trimestrales, información que servirá para corroborar, rectificar o desmentir estas primeras previsiones.
Lo que los estudios dicen
A pesar de que los indicios de venta de la Samsung Gear Fit son prometedores, máxime en un escenario en el que los wearables ganan peso ya que se espera que durante este año se vendan entre 14 y 18 millones de unidades, existen estudios que no son halagüeños para los intereses de las marcas de wearables. Según Endeavour Partners, más de un 30% de los usuarios que adquieren un wearable lo deja de usar a los seis meses. Tal vez el caso de Nike y su Fuelband sea ilustrativo de este análisis ya que la firma norteamericana despedirá a 70 personas destinadas al desarrollo de la pulsera deportiva. De hecho, si no hay cambios de última hora, parece que el desarrollo de una segunda versión de la Nike Fuelband será cancelada.
