Los wearables están cada vez más presentes en nuestro mundo cotidiano, eso es un hecho. Pues a partir de ahora, parece que se van a extender todavía más al "descubrir" las utilidades que pueden tener con pacientes de esclerosis múltiple o parkinson.
La esclerosis múltiple es una enfermedad consistente en la aparición de lesiones desmielinizantes, neurodegenerativas y crónicas del sistema nervioso central. La introducción de los wearables en este ámbito vendría de la mano de las pulseras Fitbit, que permitirían, según ha declarado la farmacéutica Biogen Idec (BIIB), recopilar los datos de los pacientes, pudiendo así mejorar los tratamientos, puesto que conociendo, por ejemplo, cuánto y cómo de rápido andan sus pacientes se puede determinar la progresión de la enfermedad y ajustarse a ella.
El presidente ejecutivo de Biogen George Scangos ha afirmado que no le sorprendería que en un período de tiempo antes de una recaída, algo cambiase sobre el movimiento de un paciente, y esto se podría detectar con estas pulseras Fitbit.
El parkinson, por otra parte, es un trastorno neurodegenerativo crónico que conduce con el tiempo a una incapacidad progresiva, producido a consecuencia de la destrucción, por causas que todavía se desconocen, de las neuronas pigmentadas de la sustancia negra. Frecuentemente clasificada como un trastorno del movimiento, la enfermedad de Parkinson también desencadena alteraciones en la función cognitiva, en la expresión de las emociones y en la función autónoma.
Los wearables pueden ayudar en el tratamiento de esta enfermedad a través de un cinturón.
Dicho cinturón tiene espacio para un pequeño dispositivo (similar a un smartphone) que cuenta con unos sensores que analizan el estado del paciente, examinando sus movimientos para ir viendo los patrones sintomatológicos que están relacionados con esta enfermedad. Gracias a ello, el REMPARK tiene autonomía para ver cómo se encuentra el paciente y en qué fase está cuando este realiza actividades o simplemente camina.
Está claro que aún queda un largo camino por delante, pero con estos nuevos usos de estos útiles electrónicos se da un gran paso para consolidarlos en nuestras vidas.
La esclerosis múltiple es una enfermedad consistente en la aparición de lesiones desmielinizantes, neurodegenerativas y crónicas del sistema nervioso central. La introducción de los wearables en este ámbito vendría de la mano de las pulseras Fitbit, que permitirían, según ha declarado la farmacéutica Biogen Idec (BIIB), recopilar los datos de los pacientes, pudiendo así mejorar los tratamientos, puesto que conociendo, por ejemplo, cuánto y cómo de rápido andan sus pacientes se puede determinar la progresión de la enfermedad y ajustarse a ella.
El presidente ejecutivo de Biogen George Scangos ha afirmado que no le sorprendería que en un período de tiempo antes de una recaída, algo cambiase sobre el movimiento de un paciente, y esto se podría detectar con estas pulseras Fitbit.
El parkinson, por otra parte, es un trastorno neurodegenerativo crónico que conduce con el tiempo a una incapacidad progresiva, producido a consecuencia de la destrucción, por causas que todavía se desconocen, de las neuronas pigmentadas de la sustancia negra. Frecuentemente clasificada como un trastorno del movimiento, la enfermedad de Parkinson también desencadena alteraciones en la función cognitiva, en la expresión de las emociones y en la función autónoma.
Los wearables pueden ayudar en el tratamiento de esta enfermedad a través de un cinturón.
Dicho cinturón tiene espacio para un pequeño dispositivo (similar a un smartphone) que cuenta con unos sensores que analizan el estado del paciente, examinando sus movimientos para ir viendo los patrones sintomatológicos que están relacionados con esta enfermedad. Gracias a ello, el REMPARK tiene autonomía para ver cómo se encuentra el paciente y en qué fase está cuando este realiza actividades o simplemente camina.
Está claro que aún queda un largo camino por delante, pero con estos nuevos usos de estos útiles electrónicos se da un gran paso para consolidarlos en nuestras vidas.
