Cualquier smartwatch que en un uso real, tirando a intenso, sin tener que hacer configuraciones especiales , no llegue como poco a los dos días holgados de autonomía (personalmente descarto los que no lleguen a cuatro) y/o que no sean capaces de recuperar la carga a niveles de uso mínimo en el tiempo que dure una ducha y poco más no es eficaz. En resto es palabrería de marketing vendiendo humo. He sido uno más de los que apostó por el sistema operativo de la eterna promesa y me fastidia reconocer que no cumple, no sirve de nada que te mida el sueño un reloj del que no tienes la absoluta certeza que llegará a esa noche sin necesitar dos horas de carga nada más despertar, es un absurdo, el público general al que se supone va dirigido en un uso normal de una jornada laboral no dispone de ese tiempo, a menos que te despiertes antes para poner a cargar el reloj con lo cual... Sin comentarios.
Un avance sin duda por parte de los chicos de mobvoi pero como consumidor algo puesto, veo lagunas.