Venimos hablando desde hace ya unos años de las ventajas que toda la tecnología relacionada con los wearables,va a aportarnos, ya no solo en años venideros, sino que ya se encuentran en gran medida entre nosotros, aunque es este un mercado que tiene que crecer mucho más.
Esto es algo que ya vienen demostrando los últimos informes que año tras año se van haciendo públicos y que hacen referencia a la penetración de mercado que estos gadgets van logrando. Pues bien, por lo que se ha podido saber recientemente, a lo largo del año pasado se enviaron 115,4 millones de wearables en todo el mundo. Sin embargo, no cabe duda de que uno de los productos de este tipo que una mayor aceptación está teniendo en los últimos meses, son los relojes inteligentes o smartwatches.
Estos son unos productos que ya llevan unos años entre nosotros pero que, al contrario de lo que se pensó en sus inicios, no ha sido hasta ahora cuando un buen número de usuarios han comenzado a ver su utilidad. De hecho, en el último informe de IDC relativo a la penetración de mercado de estos dispositivos a nivel global, indica que el año pasado se vendieron 32,7 millones de relojes inteligentes, lo que supone un aumento del 60%, donde el promedio de precio de estos productos ronda los 350 euros.
¿Cuál es la principal razón por la que adquirir un smartwatch?
Por el momento ha sido Apple la firma que está liderando este mercado con 17,7 millones de unidades del Apple Watch, ventas que han aumentado de manera considerable tras el lanzamiento de la serie 3. De lo que no cabe duda es de que este crecimiento registrado en los últimos meses, en gran medida se debe a que los consumidores, entre otras cosas, quieren poder llevar encima en todo momento un producto que sea capaz de hacer un seguimiento de métricas avanzadas que están directamente relacionadas con la salud y el estado físico.
De hecho, al parecer muchos de los que en su momento comenzaron a usar pulseras de rendimiento asequibles estos años atrás, ahora ya están dando el paso hacia los relojes inteligentes más caros. Así algunos fabricantes de estas pulseras igualmente están actualizando su gama de producto migrando a los relojes inteligentes, como es el caso de Fitbit, entre otros.
Por lo tanto la salud es una de las razones de este crecimiento, pero lo cierto es que también hay una gran demanda de aplicaciones que se puedan usar en estos dispositivos para todo tipo de trabajos y modos de uso, aunque han tenido que pasar tres largos años para que los consumidores empiecen a ver utilidad en un smartwatch.
Nota original
Esto es algo que ya vienen demostrando los últimos informes que año tras año se van haciendo públicos y que hacen referencia a la penetración de mercado que estos gadgets van logrando. Pues bien, por lo que se ha podido saber recientemente, a lo largo del año pasado se enviaron 115,4 millones de wearables en todo el mundo. Sin embargo, no cabe duda de que uno de los productos de este tipo que una mayor aceptación está teniendo en los últimos meses, son los relojes inteligentes o smartwatches.
Estos son unos productos que ya llevan unos años entre nosotros pero que, al contrario de lo que se pensó en sus inicios, no ha sido hasta ahora cuando un buen número de usuarios han comenzado a ver su utilidad. De hecho, en el último informe de IDC relativo a la penetración de mercado de estos dispositivos a nivel global, indica que el año pasado se vendieron 32,7 millones de relojes inteligentes, lo que supone un aumento del 60%, donde el promedio de precio de estos productos ronda los 350 euros.
¿Cuál es la principal razón por la que adquirir un smartwatch?
Por el momento ha sido Apple la firma que está liderando este mercado con 17,7 millones de unidades del Apple Watch, ventas que han aumentado de manera considerable tras el lanzamiento de la serie 3. De lo que no cabe duda es de que este crecimiento registrado en los últimos meses, en gran medida se debe a que los consumidores, entre otras cosas, quieren poder llevar encima en todo momento un producto que sea capaz de hacer un seguimiento de métricas avanzadas que están directamente relacionadas con la salud y el estado físico.
De hecho, al parecer muchos de los que en su momento comenzaron a usar pulseras de rendimiento asequibles estos años atrás, ahora ya están dando el paso hacia los relojes inteligentes más caros. Así algunos fabricantes de estas pulseras igualmente están actualizando su gama de producto migrando a los relojes inteligentes, como es el caso de Fitbit, entre otros.
Por lo tanto la salud es una de las razones de este crecimiento, pero lo cierto es que también hay una gran demanda de aplicaciones que se puedan usar en estos dispositivos para todo tipo de trabajos y modos de uso, aunque han tenido que pasar tres largos años para que los consumidores empiecen a ver utilidad en un smartwatch.
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