El Misfit Vapor 2 tiene un gran problema: es el smartwatch que Misfit debía haber lanzado hace un año.
Aunque Misfit no sea tan conocida como Fitbit, se ha ganado el respeto con sus funcionales pulseras de fitness de estilo minimalista como Phase, Ray y el Shine 2. Por eso cuando anunciaron su primer smartwatch con pantalla táctil, el primer Misfit Vapor, fue recibido con entusiasmo durante el CES 2017. Era un buen smatwatch Android: tenía un bonito cristal pulido, software propio de Misfit, pagos NFC, GPS incluido y prometía monitorizar tu ritmo cardíaco y medir la calidad de tu sueño. Más tarde, el Vapor se quedó en un sinfín de promesas incumplidas. Pasaron los meses y cambió Misfit OS for Wear OS (entonces, Android Wear). Su fecha de lanzamiento estaba programada para el verano de 2017, pero llegó el día y nadie tenía noticias del Vapor. Cuando finalmente se comenzó a enviar a finales de diciembre de 2017, los pagos NFC y el GPS incorporado también habían desaparecido.
Así que, en realidad, lo único que hacía falta era conseguir un Vapor 2 bien hecho, ¡y lo consiguieron! Solo que no está siendo una historia muy diferente a la de su predecesor. En 2018, ya existen muchos smartwatch con mucho estilo y que funcionan bien. Desafortunadamente, el Vapor 2 no consigue destacar entre ellos.
En cuanto a su diseño, el Vapor 2 ha eliminado el bisel de cristal que tenía el Vapor original. Perder ese elemento distintivo ha sido una decepción. Sin él, el Vapor 2 sigue siendo elegante, pero también es muy similar a los de su compañía matriz Fossil, especialmente al Fossil Q Venture HR. Comparado con el Vapor, el Vapor 2 tiene unas asas más aerodinámicas y que le dan una apariencia industrial más elegante. Viene en dos tamaños: 41 mm y 46 mm. El de 41 mm tiene una pantalla AMOLED de 1,2 pulgadas y mide solo 11 mm de grosor. La versión de 46 mm tiene una pantalla de 1,4 pulgadas y un grosor de 11,2 mm. En el lado derecho, hay un solo botón que puedes utilizar para acceder al menú o mantenerlo presionado para abrir el asistente de Google. También funciona como un dial para desplazarte entre las notificaciones.
El Vapor 2 está disponible en muchos colores. Puedes optar por una caja de oro rosa, acero inoxidable o negra, junto con una correa deportiva de silicona o con detalles de acero inoxidable. Opté por probar la versión de 41 mm en oro rosa y me pareció muy cómoda y elegante. Y aunque inicialmente era escéptica respecto a lo que afirmaba Misfit de que la correa deportiva imitaba bien la apariencia del cuero, estaba completamente equivocada. Se siente y se ve mucho mejor que, por ejemplo, las correas estándar de silicona que vienen con el Apple Watch. Además, aguanta bastante bien mientras haces ejercicio.
El Vapor 2 incluye un monitor óptico de frecuencia cardíaca y lo convierte en una pulsera de fitness decente.
Foto: Sam Rutherford (Gizmodo)
Hablando de eso, el Vapor 2 es un buen compañero de fitness. Tiene un acelerómetro, un altímetro, un giroscopio y un sensor óptico de frecuencia cardíaca. También es resistente al agua para “nadar a poca profundidad” (hasta 30 metros). Así que mientras no bucees en aguas muy profundas, todo debería funcionar correctamente. También tiene 4GB de almacenamiento para música y aplicaciones, una cantidad bastante estándar en lo que respecta a smartwatches. Sin embargo, depende de forma nativa de Google Fit y Google Fit Workout para registrar tus datos, y eso es algo decepcionante. La aplicación propia de Misfit funciona bastante bien y, aunque supone un paso adicional para configurarlo, puede ser una razón para elegir este reloj por encima de los demás relojes que utilizan Wear OS.
En cuanto a la precisión, el Vapor 2 es bastante certero a la hora de monitorizar la frecuencia cardíaca,usar el GPS y contar pasos. Lo usé simultáneamente con el Fitbit Versa y el Apple Watch Series 4. En las pruebas de conteo de pasos durante todo el día, los tres dispositivos estaban a 200-300 pasos uno del otro. No está nada mal. Durante una carrera de 3,2 kilómetros en el Prospect Park de Brooklyn, nunca tuve problemas para conectarme al GPS. Tuve algunos contratiempos durante algunos paseos cortos por la ciudad, pero eso sucede con frecuencia en zonas con edificios altos. En lo que se refiere a la precisión de las distancias, marcó 3,08 kilómetros durante mi carrera de 3,2; mientras que el Apple Watch registró 3,17 kilómetros. Es una diferencia bastante insignificante en general. (No utilicé el Fitbit Versa en esta comparación, ya que no tiene GPS incorporado). En cuanto a la frecuencia cardíaca, el Vapor 2 estaba generalmente 5 o 10 latidos por minuto desfasado con el Polar H10 que tenía atado a mi pecho. También son buenas cifras y está en la linea de otras pulseras de fitness.
Aún así, para ser un smarwatch de Misfit, el Vapor 2 tiene pocas funciones de fitness y bienestar. Sí, puedes descargar aplicaciones de terceros desde la Play Store, pero de por sí, solo tienes unas pocas funciones de Google. Y si utilizabas desde hace tiempo la aplicación de Misfit, perderás todo tu historial de datos, ya que el Vapor 2 no es un dispositivo compatible con ella.
Foto: Sam Rutherford (Gizmodo)
Todo esto tendría un pase si manejar el Vapor 2 fuese una experiencia realmente increíble. En realidad, está bien. Pero aunque el Vapor 2 añade pagos NFC a través de Google Pay, se ve limitado por el anticuado chip Snapdragon Wear 2100 y la mediocre batería que trae. A diferencia del Fossil Sport, que tiene el último procesador 3100, hay algo de lag o algún fallo en la pantalla al pasar de un menú a otro. En cuanto a la batería, aunque que tiene una media entre 20 y 24 horas de uso, ese número se reduce drásticamente si haces algo más que mirar las notificaciones.
Por ejemplo, el Vapor 2 tardó unos 15 minutos en descargar una actualización de Wear OS. En ese tiempo, pasó de 100 por ciento de batería al 79%. Para empeorar las cosas, la batería se calentó tanto que me quemaba la piel. Verás un consumo de batería similar después de los entrenamientos en los que uses el GPS. La función de carga rápida del Vapor 2 al menos compensa en parte la duración mediocre de la batería. Si llevas el cargador en la mochila, puedes cargar de 0 al 80 por ciento en 50 minutos. La mayoría de las pulseras de fitness y smartwatches tardan aproximadamente 2 horas en cargar la batería por completo.
El Vapor 2 se ha librado de su distintivo bisel táctil. Foto: Sam Rutherford (Gizmodo)
Así que, aparte de tener un precio decente de 250 dólares (¡para cualquiera de los tamaños!) y un diseño elegante, en realidad no hay nada que haga que el Misfit Vapor 2 sea realmente especial. Cumple con su trabajo y no es tampoco una birria. Eso sí, luce bien en la muñeca. Sin duda, cuesta muchísimo menos que los 400 dólares de base que los Apple Watch Serie 4 o los 330 dólares del Samsung Galaxy Watch. Pero esos relojes tienen una serie de características atractivas –como lecturas de ECG o una batería más duradera– que justifican su coste.
La única razón real para comprar el Misfit Vapor 2 es que busques un smartwatch compatible con Android y no quieras gastarte mucho. Y si eso es lo que buscas, el Fossil Sport es solo $5 más caro, tiene un procesador más nuevo y básicamente todas las mismas características. Así que, realmente, lo único que el Vapor 2 tiene a su favor es un diseño ligeramente más sofisticado. Si Misfit lo hubiera lanzado hace un año, todo esto sería diferente, pero no fue así. Así que, de momento, se trata de una oportunidad perdida más.
En resumen
- Es un smarwatch muy elegante, pero haber perdido el marco original del Vapor le ha hecho perder su elemento distintivo.
- Es bastante preciso, pero sus funciones generales de fitness son demasiado insulsas, teniendo en cuenta que se trata de un smartwatch de Misfit.
- Su desfasado Snapdragon Wear 2100 y la duración de la batería resultan decepcionantes.
- Añade los pagos NFC y el GPS incorporado que le faltaban al Vapor original.
