Considerado el mayor fracaso de Nintendo y convirtiéndose en un chiste recurrente durante años, la Virtual Boy fue el debut de la compañía en 1995 de la realidad virtual. Pero la rápida muerte de la consola no desalentó a Nintendo, y 24 años después, su segundo intento ha conseguido aprovechar el hardware de la Switch para ofrecerte una serie de juegos que te permiten experimentar la realidad virtual por tan solo $40.
Yo seguramente sea una de las pocas personas que en realidad no odiaba a la Virtual Boy. Sí, uno tardaba en acostumbrarse a los gráficos monocromáticos de color rojo sangre, pero la experiencia 3D estaba bien, y llegó en un momento en el que nadie más estaba haciendo juegos en 3D. Probablemente ayudó el hecho de que me hiciera con mi Virtual Boy y un puñado de juegos por solo $20 en una tienda de segunda mano.
Puede que no sea un resultado directo de las lecciones que Nintendo aprendió después del fracaso de la Virtual Boy, pero por solo $40, es una cosa que merece la pena probar.
Al igual que con los kits Labo anteriores, la nueva versión VR aprovecha tu hardware existente utilizando una serie de accesorios de cartón para introducir nuevas experiencias de juego. Los juegos y los mundos de realidad virtual incluidos en el kit Labo: VR están increíblemente bien elaborados y son realmente divertidos, lo cual no resulta sorprendente dado el pedigrí de Nintendo. Son experiencias de realidad virtual de tamaño reducido que no requieren mucha inversión, siempre y cuando no te parezca algo negativo tener que construir tu mismo los juguetes de cartón.
Una de las pocas quejas que tuve contra el primer set de Labo fue la pesadez de construir todos los componentes de cartón. Al igual que ocurre con los muebles de IKEA, Nintendo deja la parte del montaje al consumidor, por lo que aunque ahorras dinero, pierdes tiempo. Nada ha cambiado con los nuevos Toy-Cons
del Labo: VR Kit , y eso es una pena, porque el proceso consume tiempo y rápidamente se vuelve repetitivo y tedioso. Las instrucciones son fáciles de seguir —es casi imposible cometer un error— pero Nintendo deberá incluir unas instrucciones algo menos detalladas para los que estén algo más versados en este tipo de cosas. Incluso la capacidad para reproducir las instrucciones al doble de velocidad estaría bien.
Los últimos juguetes Labo tienen la misma complejidad que los anteriores, a excepción del nuevo Toy-Con Blaster, que cuenta con un mecanismo de carga deslizante y un gatillo funcional; ¡es una auténtica maravilla de la ingeniería! Lo que es diferente esta vez es que todos los accesorios utilizan unas gafas Labo VR con un par de grandes lentes de plástico. Esencialmente, es el mismo enfoque que utilizan las Google Cardboard y otros visores VR desechables, pero parece una experiencia más envolvente debido a que la gran pantalla de la Switch llena mejor tu campo de visión que un smartphone.
No hay ninguna correa para la cabeza, lo que significa que tendrás que sostener los Toy-Cons en la cara todo el tiempo mientras juegas. El cartón es suficientemente liviano por sí solo, pero con la Switch y los Joy-Cons, no tardarás mucho en notar el peso. Afortunadamente, los juegos que vienen y las experiencias de realidad virtual que hay no te tendrán tanto tiempo enganchado como para que te empiece a doler
Labo: VR Kit incluye una combinación de juegos, aventuras sandbox y aplicaciones creativas que son una buena muestra de lo que puedes hacer actualmente en la realidad virtual, pero no todas son igual de divertidas.
Cada Toy-Con comienza con un simple juego que te muestra cómo funciona el accesorio, pero si profundizas un poco más, encontrarás otras cosas interesantes para explorar. Por ejemplo, además de resolver los desafíos de los laberintos, el Toy-Con Elephant también se puede usar como un bolígrafo virtual 3D para modelar objetos en una gran sala vacía. Puede que no suene muy atractivo, pero me pasé más tiempo del que pretendía simplemente haciendo garabatos en el aire. Y aunque ahora no está todavía disponible, Nintendo ha prometido que Super Mario Odyssey y The Legend of Zelda: Breath of the Wild tendrán opciones para usar el Labo: VR-Kit, así que cuando te aburras de todo el contenido de Labo, tendrás otras cuantas cosas para hacer.
El Labo: VR Kit parece el siguiente paso de lo que Google hizo con sus Google Cardboard. Pero ten en cuenta que el modelo de Nintendo todavía tiene los mismos fallos que el resto de modelos VR baratos. Sus gráficos limitados, el desfase de movimiento o los frame rates inferiores harán que algunos usuarios sufran mareos. Yo no me mareo nunca, pero solo soy capaz de jugar con uno de los Toy-Cons durante diez minutos antes de empezar a sentirme así.
Imagen: Andrew Liszewski (Gizmodo)
Si crees que el Kit Labo es como ponerte unas gafas de realidad virtual de $500 estás muy equivocado. Pero por $40, logra hacer milagros con algo de cartón, unas gomas elásticas y varias pegatinas reflectantes. Ya sabía que el proceso de construcción sería tedioso (y todavía tengo un par de cortes por el papel en las manos), lo que no esperaba era encontrarme con una gran experiencia de realidad virtual que no me canso de disfrutar.
En resumen
Yo seguramente sea una de las pocas personas que en realidad no odiaba a la Virtual Boy. Sí, uno tardaba en acostumbrarse a los gráficos monocromáticos de color rojo sangre, pero la experiencia 3D estaba bien, y llegó en un momento en el que nadie más estaba haciendo juegos en 3D. Probablemente ayudó el hecho de que me hiciera con mi Virtual Boy y un puñado de juegos por solo $20 en una tienda de segunda mano.
Puede que no sea un resultado directo de las lecciones que Nintendo aprendió después del fracaso de la Virtual Boy, pero por solo $40, es una cosa que merece la pena probar.
Al igual que con los kits Labo anteriores, la nueva versión VR aprovecha tu hardware existente utilizando una serie de accesorios de cartón para introducir nuevas experiencias de juego. Los juegos y los mundos de realidad virtual incluidos en el kit Labo: VR están increíblemente bien elaborados y son realmente divertidos, lo cual no resulta sorprendente dado el pedigrí de Nintendo. Son experiencias de realidad virtual de tamaño reducido que no requieren mucha inversión, siempre y cuando no te parezca algo negativo tener que construir tu mismo los juguetes de cartón.
Una de las pocas quejas que tuve contra el primer set de Labo fue la pesadez de construir todos los componentes de cartón. Al igual que ocurre con los muebles de IKEA, Nintendo deja la parte del montaje al consumidor, por lo que aunque ahorras dinero, pierdes tiempo. Nada ha cambiado con los nuevos Toy-Cons
del Labo: VR Kit , y eso es una pena, porque el proceso consume tiempo y rápidamente se vuelve repetitivo y tedioso. Las instrucciones son fáciles de seguir —es casi imposible cometer un error— pero Nintendo deberá incluir unas instrucciones algo menos detalladas para los que estén algo más versados en este tipo de cosas. Incluso la capacidad para reproducir las instrucciones al doble de velocidad estaría bien.
Los últimos juguetes Labo tienen la misma complejidad que los anteriores, a excepción del nuevo Toy-Con Blaster, que cuenta con un mecanismo de carga deslizante y un gatillo funcional; ¡es una auténtica maravilla de la ingeniería! Lo que es diferente esta vez es que todos los accesorios utilizan unas gafas Labo VR con un par de grandes lentes de plástico. Esencialmente, es el mismo enfoque que utilizan las Google Cardboard y otros visores VR desechables, pero parece una experiencia más envolvente debido a que la gran pantalla de la Switch llena mejor tu campo de visión que un smartphone.
No hay ninguna correa para la cabeza, lo que significa que tendrás que sostener los Toy-Cons en la cara todo el tiempo mientras juegas. El cartón es suficientemente liviano por sí solo, pero con la Switch y los Joy-Cons, no tardarás mucho en notar el peso. Afortunadamente, los juegos que vienen y las experiencias de realidad virtual que hay no te tendrán tanto tiempo enganchado como para que te empiece a doler
Labo: VR Kit incluye una combinación de juegos, aventuras sandbox y aplicaciones creativas que son una buena muestra de lo que puedes hacer actualmente en la realidad virtual, pero no todas son igual de divertidas.
Cada Toy-Con comienza con un simple juego que te muestra cómo funciona el accesorio, pero si profundizas un poco más, encontrarás otras cosas interesantes para explorar. Por ejemplo, además de resolver los desafíos de los laberintos, el Toy-Con Elephant también se puede usar como un bolígrafo virtual 3D para modelar objetos en una gran sala vacía. Puede que no suene muy atractivo, pero me pasé más tiempo del que pretendía simplemente haciendo garabatos en el aire. Y aunque ahora no está todavía disponible, Nintendo ha prometido que Super Mario Odyssey y The Legend of Zelda: Breath of the Wild tendrán opciones para usar el Labo: VR-Kit, así que cuando te aburras de todo el contenido de Labo, tendrás otras cuantas cosas para hacer.
El Labo: VR Kit parece el siguiente paso de lo que Google hizo con sus Google Cardboard. Pero ten en cuenta que el modelo de Nintendo todavía tiene los mismos fallos que el resto de modelos VR baratos. Sus gráficos limitados, el desfase de movimiento o los frame rates inferiores harán que algunos usuarios sufran mareos. Yo no me mareo nunca, pero solo soy capaz de jugar con uno de los Toy-Cons durante diez minutos antes de empezar a sentirme así.
Imagen: Andrew Liszewski (Gizmodo)
Si crees que el Kit Labo es como ponerte unas gafas de realidad virtual de $500 estás muy equivocado. Pero por $40, logra hacer milagros con algo de cartón, unas gomas elásticas y varias pegatinas reflectantes. Ya sabía que el proceso de construcción sería tedioso (y todavía tengo un par de cortes por el papel en las manos), lo que no esperaba era encontrarme con una gran experiencia de realidad virtual que no me canso de disfrutar.
En resumen
- Si ya tienes una Switch, por $40 puedes convertir tu consola en un juguete VR y no sentirte muy culpable cuando te acabes aburriendo de él.
- ¿Cuándo se hizo Nintendo experta en hacer estas obras de ingeniería de cartón? A lo mejor empiezan a fabricar muebles baratos dentro de poco .
- Construir los Toy-Cons de cartón lleva bastante tiempo (más de una hora en algunos casos) y las metódicas instrucciones paso a paso del juego podrían acabar frustrando a los constructores más experimentados.
- Las experiencias del Labo: VR Kit son como una colección de minijuegos, pero Nintendo ha sabido cómo hacerlos bien, por lo que puedes repetir muchas veces hasta llegar a cansarte.
- La gran pantalla de la Switch llena bien el campo de visión para que la experiencia se sienta más inmersiva, pero la resolución y los frame rates son más limitados y pueden provocar náuseas o mareos a algunos usuarios.