Google Glass no es el único dispositivo wearable en el que Google está trabajando.
Ya hemos hablado en otras ocasiones de la apuesta de Google por la investigación médica, con megaproyectos como el Estudio Baseline. Está convencida de que en el futuro curaremos todas las enfermedades, y podremos vivir hasta los 500 años.
Su apuesta más firme es la detección de las enfermedades antes de que se produzcan, mediante el análisis celular, e incluso molecular. Por eso esta patente de Google que se ha filtrado, vía Talk Android, tiene todo el sentido.
Google X, uno de los laboratorios experimentales de la compañía, está trabajando en una pulsera wearable capaz de detectar el cáncer:
La pulsera trabajaría en conjunción con una píldora de nanopartículas de óxido de hierro, que el paciente tendría que tomar. Estas nanopartículas viajan por todo el cuerpo, a través de la sangre. Son capaces de detectar células cancerígenas a través de las señales bioquímicas. La nanopartículas "pintarían" estas células con el óxido de hierro, pegándose a ellas y dejándolas marcadas.
La pulsera se coloca en la muñeca y emite una señal energética, que se transmite por todo el cuerpo. Podría tratarse de radiofrecuencias, electromagnetismo o pulsos acústicos:
El wearable sería capaz de captar las señales provenientes de las nanopartículas que circulan por la sangre. Puesto que contienen óxido de hierro, quizá se trate de un pulso electromagnético que detecte las células cancerígenas pintadas por las nanopartículas.
La patente afirma que la pulsera podría ir más allá de detectar el cáncer, pues se podría aplicar a otro tipo de señales, lo que serviría para detectar el Parkinson, por ejemplo.
De momento sólo es una patente, y a veces este tipo de proyectos son imposibles de llevar a la práctica, o tardan años. Pero no cabe duda que los científicos están trabajando en nuevos métodos que permitirán tratar las enfermedades de forma más eficaz y menos intrusiva para los pacientes.
Fuente: http://computerhoy.com
Ya hemos hablado en otras ocasiones de la apuesta de Google por la investigación médica, con megaproyectos como el Estudio Baseline. Está convencida de que en el futuro curaremos todas las enfermedades, y podremos vivir hasta los 500 años.
Su apuesta más firme es la detección de las enfermedades antes de que se produzcan, mediante el análisis celular, e incluso molecular. Por eso esta patente de Google que se ha filtrado, vía Talk Android, tiene todo el sentido.
Google X, uno de los laboratorios experimentales de la compañía, está trabajando en una pulsera wearable capaz de detectar el cáncer:
La pulsera trabajaría en conjunción con una píldora de nanopartículas de óxido de hierro, que el paciente tendría que tomar. Estas nanopartículas viajan por todo el cuerpo, a través de la sangre. Son capaces de detectar células cancerígenas a través de las señales bioquímicas. La nanopartículas "pintarían" estas células con el óxido de hierro, pegándose a ellas y dejándolas marcadas.
La pulsera se coloca en la muñeca y emite una señal energética, que se transmite por todo el cuerpo. Podría tratarse de radiofrecuencias, electromagnetismo o pulsos acústicos:
El wearable sería capaz de captar las señales provenientes de las nanopartículas que circulan por la sangre. Puesto que contienen óxido de hierro, quizá se trate de un pulso electromagnético que detecte las células cancerígenas pintadas por las nanopartículas.
La patente afirma que la pulsera podría ir más allá de detectar el cáncer, pues se podría aplicar a otro tipo de señales, lo que serviría para detectar el Parkinson, por ejemplo.
De momento sólo es una patente, y a veces este tipo de proyectos son imposibles de llevar a la práctica, o tardan años. Pero no cabe duda que los científicos están trabajando en nuevos métodos que permitirán tratar las enfermedades de forma más eficaz y menos intrusiva para los pacientes.
Fuente: http://computerhoy.com