No es ninguna sorpresa que Google ha tenido abandonada la plataforma para dispositivos móviles Wear OS, anteriormente conocida como Android Wear, durante los dos últimos años. Cuando se lanzó inicialmente Android Wear, Google parecía que se quería convertir en el referente del mercado de los wearables, pero ha sucedido todo lo contrario.
El único movimiento interesante y que ha llamado la atención relacionado con Android Wear, fue el cambio de nombre que recibió hace unos meses. Poco más. Que los fabricantes no hayan podido añadir una capa de personalización a sus dispositivos, puede que haya sido otro de los motivos por el que cada vez es más complicado encontrar smartwatches gestionados por este sistema operativo.
La consultora NDP ha publicado un informe en el que nos muestra información acerca del mercado de los wearables en Estados Unidos. Ese informe nos muestra como la cuota de mercado de Wear OS es de tan solo el 10%, mientras que el resto de los fabricantes, encabezados por Apple y seguido de Samsung y Fitbit, tienen una cuota del 88%. El resto de la cuota, el 2% se lo reparten fabricantes como Garmin y Xiaomi.
Según este informe, las ventas de smartwatches en 2018 se han incrementado en un 51% en comparación con 2017. Además, el gasto que los usuarios han invertido en este tipo de dispositivos también se ha incrementado en un 61% alcanzando los 5.000 millones de dólares.
Los informes como estos se basan en estimaciones y proyecciones elaboradas por analistas de la industria, por lo que en general suelen ser precisos aunque no sean correctos al 100% y sin duda hay cierto margen de maniobra para interpretar estas métricas.
Pero incluso con el beneficio de la duda, las ventas de dispositivos con sistema operativo Wear no están a la altura de la competencia y para tratar de cambiar esta tendencia, entendemos ahora el acuerdo al que llegó el gigante de las búsquedas con el grupo Fossil.