Entrenar con dispositivos inteligentes tiene repercusiones positivas tanto desde el punto de vista médico como en el usuario, según afirma la doctora especialista en medicina del deporte Eva Ferrer en una entrevista a Garmin.
Ferrer puntualiza que, desde un punto de vista médico, se trata de herramientas que permiten monitorizar a un paciente que necesite un control de su frecuencia cardíaca, ya sea por patología o recomendación y, además, permiten a esa persona regular su esfuerzo.
Desde el punto de vista del entrenamiento, la experta considera que el uso de estos dispositivos es útil tanto para las persones nobeles que se inician, para comenzar a conocerse y saber sus límites, como para las personas más “pro”, ya que les ayuda a mejorar su rendimiento.
En el caso de los más pequeños, Ferrer cree que el uso de pulseras o dispositivos similares se puede usar con fines terapéuticos y como novedad o estímulo